jueves, 23 de diciembre de 2010

OS VISITÓ EL GRAN IMPOSTOR (III)




El pasacalle

Como es de dominio público, la Iglesia católica es una secta anacrónica que se vale del miedo y de la inseguridad de millones de hombres, mujeres y niños para someterlos a la tiranía de su dominio y de su miserable control. El principal objetivo de esta siniestra organización, es acumular riquezas y poder por medio del engaño y la amenaza. Sus componentes son entrenados en los seminarios para ganarse voluntades utilizando la mentira, las delirantes promesas de una "vida mejor" después de la muerte o, como alternativa, la amenaza de arder eternamente en las llamas del Infierno. Son parásitos de la sociedad que, en nombre de un Dios iracundo, malvado y vengativo (véase la Biblia), acumulan grandes fortunas sin aportar el menor esfuerzo. El Vaticano ha sido desde siempre un foco de corrupción y depravación sin límites. Mientras unos papas cometían pederastia con sus propias hijas (el incesto era tan común entre obispos y cardenales, como ahora lo es entre los curas “de a pie”) ...otros se distinguían por su sadismo y carácter sanguinario y todos, por lucrarse y vivir a cuerpo de rey….

Pues bien, era al representante de esta esperpéntica comunidad, al que vosotros os aprestabais a recibir en Santiago de Compostela y Barcelona. Recibíais (y financiabais con vuestros impuestos) al jefe de la Iglesia que conspira contra vuestros intereses sociales, éticos y políticos.

El hecho de que exagerarais tanto el tema de su protección y gastarais tanto dinero en ella (ver “Os visitó el gran impostor” (II)) no hace otra cosa sino demostrar que el “supremo hechicero” de esta particular tribu tiene tantos enemigos entre la gente de bien, que obliga a extremar las precauciones al máximo.
Fue divertido constatar como el simio que representa a Dios en la Tierra necesitó de más protección que el propio Obama….POR ALGO SERÍA ¡¡¡
Esta animadversión ciudadana prueba que vuestra Iglesia lleva ya muchos años equivocándose en muchas cosas, hasta el punto de hacerse odiar cada vez más.


El recibimiento al papa en Barcelona fue mucho más frío de lo esperado. En varios tramos del recorrido, la escasez de público era tan evidente que daban ganas de reír o llorar. Todo dependía de si erais ateos o católicos.


Me llamó poderosamente la atención el hecho de que gran parte de la mermada asistencia eran inmigrantes sudamericanos. Cosa que, por otra parte, era de esperar por razones históricas y folclóricas.

Algunos siguieron a B16 a la carrera durante un trecho…. quizás porque no se fiaban de lo que pudiera hacer…. (Digo yo).


La fría acogida de los ciudadanos fue noticia en varios medios internacionales que cuestionaron el cumplimiento de las expectativas creadas antes de la visita, como el delegado en España de la cadena Al Yazira, Aiman Zoubir, quien opinó que el papa "fue recibido con mucha frialdad por parte de los ciudadanos de Barcelona”.

Desde las siete de la tarde, poco más de un millar de monos domésticos jóvenes, procedentes de ciudades como Madrid, Zaragoza, Bilbao, San Sebastián (con gastos pagados) y de la propia Barcelona, se congregaron en la plaza de la catedral para esperar, con cánticos y rezos, la llegada de B16. Los jóvenes pardillos esperaban que el papamóvil llevase "luz interior" y, de esa forma, pudieran ver al papa. Las pobres criaturas no sabían que B16 llegaría procedente del aeropuerto en un coche convencional con los cristales tintados de negro...al estilo de como solía viajar Al Capone tiempo atrás. Mientras, en otros tres puntos de la ciudad, otras tantas movilizaciones protestaban contra la venida del gran impostor.

A primeras horas de la tarde, poco después de que unos 200 agentes de los Mossos llegaran a la plaza en autobuses de TMB, una treintena de miembros del sindicato anarquista CGT ascendieron por Vía Laietana hasta quedar situados a la altura de la plaza de la catedral. Los antidisturbios no les permitieron avanzar más y los sindicalistas permanecieron en una acera. Los manifestantes, junto con la numerosa presencia de policías y medios de comunicación obligaron a cortar el tráfico en uno de los carriles de la calle. Después de dos horas, los concentrados se disolvieron sin incidentes. Otros ciudadanos participaron en un pasacalle en el barrio de Sants. Los jóvenes entraron en la plaza de Osca ataviados con capirotes y unas andas donde cargaban un monigote que quería ser el papa. Después, lo pasearon por las calles del barrio y denunciaron la pederastia en la Iglesia católica.

Se esperaba que entre 400.000 y medio millón de fieles acompañaran al papa en la capital catalana. Sin embargo las más optimistas estimaciones de la Guardia Urbana, señalaron que sólo 250.000 monos domésticos habían participado en el total de los actos de B16 en Barcelona, ya que las cifras incluían tanto a los 6.500 que estaban en la Sagrada Familia como a los cerca de 13.000 que siguieron la misa desde la plaza de la Monumental. Llama la atención el “pequeño detalle” de que en la visita que llevó a cabo hace 28 años Juan Pablo II a esta misma ciudad, más de un millón de fieles le dieron la bienvenida. Todo ello a pesar de la pesada y pertinaz lluvia que acompañó su visita y al hecho de que poco antes de su llegada, ETA, hubiese puesto una bomba ¡¡¡.

A pesar de la propaganda eclesial y gubernamental, B16 sólo logró congregar (en un día tranquilo y radiante) la cuarta parte de fieles que su antecesor en el poder. Como veis, parece ser que los tiempos cambian para bien.

El despliegue policial era tan abrumador (había, ante la falta de efectivos, cientos de aspirantes a mosso) que en algunos lugares había más uniformados que civiles.


Y no se os ocurra pensar que las ridículas asistencias de público en Santiago y Barcelona se debieron a que la propaganda fue escasa…. En Galicia, por ejemplo, el arzobispo de Santiago, Julián Barrio, tuvo la desfachatez de pedir a los periodistas que “trabajaran en nombre del Señor”, y no contento con ello, al fulano no se le ocurrió otra cosa que bendecir el CENTRO INTERNACIONAL DE PRENSA ante los atónitos 1.500 periodistas nacionales y extranjeros (de 120 países) que no daban crédito ni a sus ojos ni a sus oídos. El arzobispo actuó sin importarle que se tratara de un centro laico. Fue invitado a dar una conferencia de prensa y de pronto sacó su hisopo y en un santiamén ya tenia salpicados de agua bendita al local y al personal.

Mientras ejercía de brujo, jugando con el agua, conmocionó a los presentes con las siguientes palabras "que todo lo que se haga y se hable en ese centro de prensa lo sea en el nombre del Señor” pidiendo que Dios ayudara a los periodistas a contar la verdad “..Ya que su misión es estar al servicio de la formación ética y el crecimiento interior del hombre". Luego, mientras las gaitas interpretaban el himno gallego, tanto el arzobispo como el presidente de la Xunta comparecieron ante los medios para pedir a los gallegos que participaran activamente en lo que ambos calificaron como una "visita histórica". "Galicia espera al papa, dijo Núñez Feijoo, y Galicia está preparada para recibir al papa con orgullo y gratitud". "Es el peregrino más ilustre de un Xacobeo excepcional".

En Barcelona, el alcalde, publicó un bando pidiendo que los vecinos adornaran todo el recorrido papal con senyeres. ….Las rojigualdas acabaron por ganar la partida (sabido es que la Iglesia liga bien con fascistas y gente de derechas) junto a las banderolas de bienvenida al pontífice que repartían voluntarios.

A las 9.11 horas, la comitiva salió del palacio arzobispal de Barcelona y, acto seguido, un centenar de gays que habían respondido a un llamamiento previo comenzaron a besarse al paso del papamóvil y a gritar "Yo no te espero", "la Iglesia que ilumina es la que arde" y "bote, bote, bote, pederasta el que no bote".

Esas consignas llevaron a que grupos de jóvenes católicos, que habían acudido para ver a B16, les contestaran con gritos como "esta es la juventud del papa" e, incluso, cantando el tan manido ¡¡ QUE VIVA ESPAÑA, de Manolo Escobar ¡¡. Tras varios momentos de tensión, en los que los grupos se insultaron mutuamente -"estáis ciegos", "los ciegos sois vosotros"- los Mossos d'Esquadra se interpusieron para evitar que la refriega llegara a mayores.

Jordi Petit, histórico dirigente del movimiento homosexual explicó que el improvisado besuqueo era, en realidad, Una protesta pacífica para demostrar que el amor es igual en todos los corazones; un acto reivindicativo contra la jerarquía eclesiástica que ataca los derechos humanos básicos, prohibiendo los preservativos, el divorcio y el aborto".


Fue precisamente el improvisado morreo lo que más llamó la atención sobre la visita de B16 para la prensa internacional. Hasta el punto que lo más reseñable fue el beso organizado por las asociaciones de homosexuales en Barcelona. Los fuertes y reiterados gritos de “Fuera”, “Fuera, apagaron los tímidos gritos que surgían de entre su grupito de fans. A los pocos minutos a B16 le esperaba un nuevo bochorno, esta vez eran las feministas las que le mandaban a “tomar por saco

Quizá por la importancia de la imagen, la RAI, empleaba más tiempo para informar de la protesta en forma de beso que para hablar de las palabras del pontífice. Asimismo, la mayoría de los medios digitales prepararon diversas fotogalerías con la 'besada'.

El enfrentamiento entre gays y pijos no fue el único encontronazo de la jornada. En diversos puntos de la ciudad los agentes antidisturbios se interpusieron entre grupos de católicos con banderas vaticanas y colectivos alternativos que se cruzaban insultos y que amenazaban con llegar a las manos.

Mientras B16 seguía su trayecto, una concentración contra la visita del papa reunía a más de 1.000 personas entre feministas, colectivos homosexuales y grupos alternativos. Fue un acto lúdico y festivo que comenzó en la plaza de la Universitat, donde un grupo de lesbianas coreaba consignas de todo tipo. El acto concluyó en el paseo de Gràcia. Un transexual lanzó un discurso incendiario contra las instituciones y llamó a "quemar iglesias". Después, unos 200 jóvenes anarquistas se dirigieron a la línea policial y pitaron cuando el papamóvil bajó por Pau Claris, a 200 metros de ellos.

La policía que estaba convencida de grandes alborotos provocados por los antisistema y los okupas, tuvo que admitir su error de previsión ya que, ni los unos, ni los otros hicieron acto de presencia. …¡¡¡Demasiado pronto por la mañana para encontrar un okupa levantado ¡¡¡

Divertida me pareció la inventiva ciudadana de los que, de modo espontáneo, salieron a la calle en solitario con la idea de burlarse del “Inquisidor de la fe”. Uno salió disfrazado de diablo portando un estandarte con el número del anticristo (el 666). Al pasar B16 frente a él le dedicó unos cuantos gestos obscenos mientras este le bendecía. En otra zona del “pasacalles” un par de chicas se levantaron la blusa para mostrarle las tetas (a estas no las bendijo, se limito a mirar…). Más allá, otras cuatro se presentaron frente a él vestidas de monja; portaban una pancarta en la que se identificaban como “monjas casquivanas”.

Los que se tomaron la molestia de madrugar para ver el primer viaje del papamóvil, se retiraron más bien decepcionados, y con la duda de si el conductor no habría pisado el acelerador más de lo que conviene a una exhibición papal, …como temiendo que le fueran a dispar. “Ha sido visto y no visto” fue el tópico, junto a “parecía un formula 1” fueron las frases más repetidas.

La desilusión de los que vieron que el papamóvil pasaba muy rápido fue similar a la de quienes pacientemente aguardaron el regreso del papa a la catedral. Todo el mundo esperaba que descendiera de su Mercedes en la plaza, que saludara, y que caminara los 100 metros hasta su hogar barcelonés. De ninguna manera: el vehículo enfiló la rampa del templo, lo rodeó por la fachada y dejó al pontífice en la entrada: un “servicio puerta a puerta” que no gustó nada a los que optaron por no verlo en televisión y granjearse un sitio en el punto de llegada.

Por otra parte si los asesores vaticanos no son estúpidos (cosa que cada día me parece más probable), deberían saber que el contacto visual, la proximidad física, es imprescindible para crear un ambiente cálido, para comunicar de manera eficiente y llegar al corazón de la gente provocando empatía. El hecho de desfilar a toda velocidad en papamóvil con cristales a prueba de balas
y en vehículo cubierto, en un día sin lluvia y con sol radiante, no hace otra cosa que alejar al ciudadano que intuye a un papa lejano e inasequible.
Muchos llevaban horas esperando después de viajar miles de kilómetros, y su cariño y expectación se transformó en frustración. Llegaron con una sonrisa y se fueron con una mueca de disgusto. No se puede tratar siempre al peregrino como un posible terrorista. Aunque bien mirado, quien es tan estúpido como para viajar desde el otro extremo de Europa para ver pasar el coche blindado del papa en una fracción de segundo y luego volverse a su país... se merece, de todas, todas, semejante chasco.


Hacia las tres de la tarde, un enorme camión articulado ya había recogido la mayoría de las vallas de Vía Laietana y el tráfico, y también la ciudad, empezaban a recuperar la normalidad perdida.


El abuelo capirotado que visitó Santiago de Compostela y Barcelona, nada tiene en común con el Simón Pedro de vuestras tradiciones y de vuestros cuentos de hadas. En nada se parece al pescador del lago de Tiberíades que describe el cuento. Tampoco sigue las rigurosas recomendaciones de Jesús de Nazaret a los apóstoles: "No cojáis nada para el camino: ni bastón, ni alforja, ni pan ni dinero, ni llevéis cada uno dos túnicas (propio de gente acomodada). Quedaos en la casa en que os alojéis (no ser exigentes en cuanto al alojamiento) hasta que os vayáis de aquel lugar. Y en caso de que no os reciban, sacudíos el polvo de los pies” (Lucas 9, 3-6).

Da verdadero asco comprobar como un sujeto que se habrá leído la Biblia centenares de veces, puede atreverse a pasear por las principales capitales del mundo exhibiendo poder, púrpura, joyas, tiara y bastón de mando. Carece de la vergüenza más elemental, ya que es capaz de predicar la Biblia sin mirarse al espejo. Sabe que estáis inmersos en una crisis galopante. Sabe que visita el país con el mayor índice de paro de Europa. A pesar de ello, en su inconsciencia…o en su cara dura, se embarca en un viaje que os costó unos 200.000 euros por hora. ¡Qué contrasentido!

Comparo su figura con la del Dalai Lama. Uno a pie el otro en papamóvil blindado; uno con una modesta y fina túnica unicolor, el otro con casullas y túnicas recamadas en oro y piedras preciosas; uno con la cabeza descubierta y rapada, el otro rematando su testa con una tiara enorme de oro y brillantes valorada en millones; uno calzando sandalias, el otro embutiendo sus pies en carísimos mocasines rojos de la casa Prada; mientras uno se sienta en el suelo o en una modesta silla, el otro exige un trono ostentoso…
Viendo esto, a uno le es muy fácil escoger. Es muy fácil distinguir al hombre honesto del villano sinvergüenza. A uno le daría un abrazo… al otro lo correría a gorrazos hasta las mismas puertas del infierno ¡¡¡



continuará